Día 8 – 01.11.2012 Kruger N.P. Skukuza – Pretoriuskop – Lower Sabie

Madrugamos mucho pues el parque abre hoy sus puertas una hora antes. Comienza el horario ampliado. Salimos una hora antes por la mañana y llegamos media hora después al camp. Recorremos buena parte del sur y del oeste del Kruger, abarcando el territorio entre Skukuza y Pretoriuskop y de aquí bordeando el parque por el extremo sur, hasta Lower Sabie.

Salimos muy temprano. A la apertura de las puertas ya estábamos en la cola y tras dejar las llaves del bungalow en el buzón emprendimos el recorrido. Pronto llegamos a un lago de pequeño tamaño, el Nyamundwa Damm, que pensamos era en el que el día anterior, los vitorianos habían visto los 3000 búfalos. Lo primero que nos encontramos fue un precioso ejemplar adulto de pigargo vocinglero (Haliaeetus vocifer) en una percha, completamente ajeno a nuestra presencia. Además se veían un par de rinocerontes blancos (Ceratotherium simum), varios búfalos (Syncerus cafer) y un buen número de kobo acuático (Kobus ellipsiprymnus) e impalas (Aepycerus melampus).

Sopesando el peligro. Foto Javier Robres

 

Búfalo cafre Syncerus caffer y rinoceronte blanco Certotherium simum en Nyamundwua damm. Foto Óscar Gutiérrez

Avanzamos camino y enseguida observamos de cerca una pareja de rinocerontes, aunque no los fotografiamos a gusto por encontrarse en una zona demasiado boscosa. Al poco vimos uno de los omnipresentes sisones ventrinegros, cantando a todo trapo y una hiena (Crocuta crocuta) nos salió al pàso mientras deambulaba por la zona. Con lo que nos habían contado los vitorianos, habíamos decidido ir aprisa por las pistas asfaltadas, para intentar “parasitar” algún felino.  

Sisón ventrinegro Lissotis melanogaster. Foto Héctor García

Hiena manchada Crocuta crocuta. Foto Héctor García

Proseguíamos el camino, con los ánimos un poco apagados. Nos parecía muy difícil por no decir imposible, encontrar en ese hábitat alguno de los grandes gatos, cuando de repente... Un guepardo! No podíamos creerlo. En un hábitat muy desfavorable, lleno de vegetación, y subido a un árbol... se encontraba un precioso macho de Guepardo (Acinonyx jubatus).

Lugar donde se encontraba el guepardo. Un hábitat poco favorable. Foto César Aguilar

Estuvimos disfrutándolo durante largo rato, una media hora, hasta que el bicho, que se encontraba oteando alguna presa, decidió bajar del árbol y alejarse. Lo acribillamos a fotos y teníamos un subidón encima que para qué. De nuevo los ánimos por las nubes. En cualquier caso, nos parecía muy raro observar esta especie en aquel hábitat tan distinto al que aparece en los documentales, donde los guepardos otean desde una pequeña loma, observando las inmensas llanuras del África ecuatorial. Un bicho que basa su técnica de caza en la carrera larga... no sabemos cómo puede cazar en este lugar. Pero bueno...presas... haberlas, háylas.

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto Javier Robres

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto Javier Robres

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto Óscar Gutiérrez

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto Javier Robres

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto José Ardáiz

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto Héctor García

Guepardo Acinonyx jubatus. Foto Óscar Gutiérrez

Seguíamos adelante. Nos acercábamos a la zona de Pretoriuskop Camp, y el paisaje se tornaba algo montañoso, con preciosos mogotes graníticos que hacían el paisaje bastante bonito y algo diferente a lo que ya habíamos visto. Muy cerca de NumbiGate, paramos en el Mestel Damm, un pequeño lago, donde kobos, impalas, cocodrilos e hipopótamos campaban a sus anchas. También un martín pescador pío (Ceryle rudis) nos hizo disfrutar con sus evoluciones de pesca, con cernidos cercanos y poco productivos. 

Acercándonos a Pretoriuskop. Foto Javier Robres

Nyamundwua damm. Foto Javier Robres

Seguimos viaje por la S-3 hacia Pretoriuskop. Al afrontar una bajada desde donde se divisaba una enorme extensión de terreno, observamos a lo lejos un vehículo parado en la pista, a la altura de un gran árbol solitario a unos pocos metros del camino. Todos miramos al árbol en busca de un gato y... ahí estaba! El primer leopardo (Panthera pardus) que veíamos. Ya era hora! No podemos considerar esto parasitismo, pues todos vimos el bicho antes de llegar al punto donde estaba el vehículo. Al llegar lo fotografiamos un ratito pero no lo disfrutamos mucho, pues en unos minutos bajó del árbol y desapareció entre la espesura. Pero... Sin apenas habrenos repuesto del guepardo anterior...Otro subidón!.

Leopardo Panthera pardus. Foto Héctor García

Leopardo Panthera pardus. Foto Óscar Gutiérrez

Allí mismo pudimos ver de cerca un ejemplar de azor lagartijero oscuro (Melierax metabates), pero hay que reconocer que no le hicimos mucho caso, pues estábamos todavía asimilando el avistamiento del gato. Mientras estábamos allí, llegaron unas madrileñas que nos preguntaron lo que veíamos. Tras explicarles que habíamos tenido al leopardo muy cerca, nos contaron que ellas habían estado viendo a placer un grupo de tres leones machos, apenas a unos diez kms. Como los leones acostumbran a pasar largo rato tumbados en una sombra, decidimos acercarnos al lugar por si saltaba la liebre, pero antes de esto, un vehículo en el que íban dos chicas sudafricanas nos avisaron de que había un grupo de leones en la lejanía. Miramos todos hacia donde indicaban las chicas y…

-  “Joder... leones? Pero si son sables!”

Un grupo de antílope sable (Hippotragus niger) se encontraban descansando en la lejanía. No se cómo se puede confundir un león con un antílope sable, pero a nosotros nos valió, y como fueron los únicos sables que vimos en el viaje... pues mucho más que satisfechos! 

Antílope sable Hippotragus niger. Foto Óscar Gutiérrez

De aquí nos dirigimos rápidamente hacia la zona donde estaban los leones. Enseguida vimos que todavía andaban por allí, ya que la carretera estaba saturada de vehículos (esto sí es parasitismo). Tuvimos problemas para ponernos en el lugar adecuado pero al final disfrutamos de tres ejemplares machos de león (Panthera leo) que descansaban  en la sombra. La observación de leones a plena luz del día suele ser bastante aburrida, porque no hacen sino dormir, pero uno de ellos se levantó y se fue alejando, pudiendo hacer alguna foto bonita. La verdad... Había tantos coches en la pista que ni siquiera se podía avanzar. Es decir, cuando das por buena la observación y te quieres marchar a otro lugar... simplemente no puedes. Está la pista cortada por tantos vehículos que es imposible avanzar. Eso es algo que no me gusta nada y pienso que a pesar de todo, habría que respetar el paso por la pista por si alguno tiene prisa, no? En fin. No eran todavía las 9,00 de la mañana y habíamos visto ya los tres gatos. Como diría Diego... “¡Qué sensaciones!”.

León Panthera leo. Foto Óscar Gutiérrez

León Panthera leo. Foto Óscar Gutiérrez

León Panthera leo. Foto José Ardáiz

León Panthera leo. Foto Óscar Gutiérrez

De aquí nos dirigimos hacia el Asfaal Picnicsite. Cuando entramos en el área, un olorcillo extraordinario inundó nuestras pituitarias. Nos acercamos al bar y servían un único plato, que consistía en una gruesa salchicha de kudú con una especie de flan gelatinoso salado. Además de ser muy barato (creo recordar que eran menos de 2 euros) estaba cojonudo. Lástima que no servían vino ni cerveza y lo tuvimos que regar con una sosa cerveza sin alcohol. En cualquier caso, nos pegamos un desayuno africano de los que hacen época, y estar en la mesa, tan exultantes por los recientes avistamientos, con un humor excelente y con un estornino alirrojo (Onychognathus morio) rondando por las mesas esperando las migajas... una gozada!

Teníamos constancia de que en este lugar pernoctaba un ej. de autillo cariblanco sureño (Ptilopsis granti), pero estábamos tan contentos que nos fuimos de allí sin ni siquiera buscarlo. Simplemente se nos olvidó.

Tras ver los tres gatos... euforia total. Desayuno en Asfaal Picnic Site. Foto César Aguilar

Estornino alirrojo Onychognatus morio. Foto Javier Robres

De aquí, continuamos hacia el sur por la H2-2 para llegar al Gardenia Hide. No debió ser una buena parada, porque ni siquiera lo recuerdo y no tenemos fotos, así que seguimos adelante hasta llegar a la S-25 que nos llevaba hacia el camp por la H4-2. Toda esta zona del sur del Kruger eran pistas de tierra, muy poco transitadas pero muy bonitas. Cruzamos multitud de pequeños ríos. Desde estos pequeños vados se observaban paisajes idílicos y era raro que no hubiera un ejemplar de avemartillo (Scopus umbretta) en cada uno de ellos. Además vimos otras especies como cormorán africano (Phalacrocorax africanus), martín pescador malaquita (Alcedo cristata), avefría armada (Vanellus armatus) o la carraca cola de raqueta (Coracias spatulatus).

Río Biyamiti. Foto Javier Robres

Paisaje en el sur del Kruger. En Crocodile Road. Foto Javier Robres

Avemartillo Scopus umbretta. Foto Héctor García

Paisaje con impalas, cerca de Biyamiti. Foto Héctor García

Mientras continuábamos por las pistas del sur, casi por completo desiertas de turismo, vimos un vehículo que venía de frente hacía señas al vehículo de los extremebirders Óscar, Diego y José para que pararan. No debieron darse cuenta pero cuando se acercó, nos hizo señas a nosotros. La mujer nos contó que a unos 700 mts. teníamos a placer una familia de leones con cachorros. Tras darles las gracias, avisamos a los otros por el walkie para que estuviesen atentos,ya que íban por delante nuestro. Enseguida vimos la familia de leones (Pantera leo). En la misma cuneta, a la sombra de unos arbustos, descansaban dos hembras adultas con dos cachorros de unos pocos meses. Es increíble lo difícil que es avistar la fauna en el Kruger. Óscar, José y Diego, habían pasado por allí hacía unos segundos y no los vieron, pero... es que es muy difícil. Y eso que estaban en la misma pista. Las dos hembras y un cachorro estaban muy juntas en la cuneta y el otro cachorro a unos pocos metros, también dormitaba en una sombra. Estuvimos disfrutándolos durante 20 minutos aproximadamente. Como es habitual se mostraron bastante inactivos, salvo uno de los cachorros que parecía hambriento y estuvo mamando de su madre en varias ocasiones y la otra hembra que se entregó a ratos a la higiene personal. 

León Panthera leo. Hembras adultas y cachorro mamando. Foto José Ardáiz

León Panthera leo. Hembra adulta. Foto Héctor García

León Panthera leo. Hembra adulta. Foto Héctor García

León Panthera leo. Cachorro. Foto Héctor García

León Panthera leo. Hembra adulta. Foto Javier Robres

León Panthera leo. Hembra adulta. Foto Héctor García

Postura típica de león Panthera leo. Foto Javier Robres

Tras vaciar alguna que otra tarjeta proseguimos camino. El paisaje hacía evidente que en el sur había llovido mucho más que en el norte. Los ríos bajaban con un caudal aparente y la vegetación estaba mucho más verde que por arriba. Seguían apareciendo especies habituales y otras menos habituales y disfrutamos entre otros de culebrera sombría (Circaetus cinereus), pito cardenal (Dendropicos fuscensens), barbudo pío (Tricholaema leucomelos), toco piquinegro (Tockus nasutus), alcaudón pío (Corvinella melanoleuca), pájaro ratón carirrojo (Urocolius indicus), carraca lila (Coracias caudatus) o tejedor de anteojos (Ploceus ocularis).

Carraca lila Coracias caudatus. Foto Óscar gutiérrez

Culebrera sombría Circaetus cinereus. Foto Óscar Gutiérrez

Alcaudón pío Corvinella melanoleuca. Foto Óscar Gutiérrez

Pronto llegamos a Lower Sabie Camp. Lo primero que hicimos fue contratar el nightdrive. Después compramos la cena para hacer una última barbacoa y luego algunos fueron al cibercafé, otros a descansar y algunos nos dimos una vuelta por el camp. Dentro del camp conseguimos ver animales habituales como estornino de orejas azules (Lamprotornis chalybaeus), tórtola engañosa (Streptopelia decipiens) o algún barbudo crestado (Trachyphonus vaillantii), y también una especie que no habíamos visto todavía. Bajo el enorme porche de la recepción, entre las vigas de madera descansaba una lechuza común (Tyto alba).

Lechuza común Tyto alba. Foto José Ardáiz

Alojamiento en Lower Sabie Camp. Foto Javier Robres

Río Sabie desde Lower Sabie Camp. Foto Javier Robres

Río Sabie desde Lower Sabie Camp. Foto Javier Robres

 Río Sabie y el restaurante de Lower Sabie Camp. Foto José Ardáiz

Mientras fotografiaba el paisaje sobre el río Sabie, me di cuenta que se me hacía tarde y tuve que correr para llegar a tiempo al lugar de encuentro. Cuando llegué, Óscar, Héctor, José y Diego ya estaban subidos al camión y sólo faltábamos César y yo. 
 

-  “¿Dónde está César?

-  “ No se. Andaba en el internet”

-  “ Vete a buscarlo, corre!”
-  “ Corre? Joder! Si estoy reventao! Tengo que dejar de fumar!”

Tanto los turistas como el conductor del camión parecían algo cabreados por nuestra inexistente puntualidad, aun así permitieron que intentáramos dar con César. Diego se acercó al ciber y yo fui hasta el bungalow. Nada. No apareció. Debía encontrarse por el camino y no lo pudimos localizar, así que ya nadie quería esperar más. Nos montamos en el camión y salimos al parque. Yo estaba desesperado, porque nosotros teníamos tanto las llaves del coche como las del bungalow.
 

  - “Y qué va a hacer éste ahora?”

  - “Con el frío que hace... sin llaves!”

  - “Igual se cabrea o qué?”

  - “Pues será consigo mismo, no?”

Aún así... no podía dejar de pensar que tenía por delante 3 horas de frío y oscuridad, pero...

Comenzamos aún de día y disfrutamos enormemente del atardecer. Observando sin dificultad jirafa (Giraffa camelopardalis), elefante (Loxodonta africana), impalas, duikers...

Atardecer en Lower Sabie. Foto José Ardáiz

Comienza el Night-drive. Foto José Ardáiz

Todavía de día, el conductor se paró a hablar con un ranger y le dijo que unos leones habían cazado y devorado una presa cerca de donde nos encontrábamos, así que media vuelta y a por ellos. Cuando llegamos al lugar no había nada ni conseguimos localizar la presa, así que de nuevo media vuelta. Ya de noche pudimos observar varias especies que no habíamos visto todavía. A destacar autillo cariblanco sureño (Ptilopsis granti)  y un posible chotacabras carirrojo (Caprimulgus rufigena) entre las aves, pero al menos a mi me impactaron más los mamíferos y vimos el primer puercoespín de El Cabo (Hystrix africaeaustralis) que fue un animal que me fascinó, tanto por sus movimientos como por su tamaño. Parecía un jabalí! Lástima no haber hecho una foto digna.

Autillo cariblanco sureño Ptilopsis granti. Foto José Ardáiz

Además enseguida aparecieron las estrellas de la noche, una familia de leones (Panthera leo). Dos hembras adultas y cuatro cachorros ya bastante crecidos estaban a unos pocos metros del camino. Se encontraban bastante activos, nada que ver con los avistamientos diurnos. Las hembras parecían vigilantes y los cachorros jugaban entre ellos. La verdad es que era una delicia observarlos. De repente, las dos hembras se alejaron. A mi me pareció que estaban como alarmadas. Los cachorros se quedaron por allí con sus juegos por lo que pensé que iban a cazar. La verdad es que fue un disfrute brutal pero en mi opinión, lo mejor estaba por venir. De repente, un rugido escalofriante inundó la noche. Buaaah! Fue impactante! Le siguieron otros cuantos rugidos absolutamente estremecedores. En el camión se hizo el silencio absoluto y todos alucinábamos con un sonido tan sugerente. Una sensación inolvidable. 

Yo ya había oído rugir a los leones en la noche kenyana, pero era otro tipo de rugido, más corto y continuo. Desconozco el significado de ambos, pero seguro que cada uno sirve para cosas distintas. Creo que el de Kenya era una llamada de contacto, en cambio, éste de aquí se me antojaba más como un rugido de territorialidad. Impresionante!!! Para mi... uno de los momentazos del viaje. Aún así, me deprimía el pensar que César se estaba perdiendo semejante  espectáculo... Joder! En fin... Cuando los cachorros se alejaron de la pista y tras asimilar tamaño espectáculo, continuamos con el recorrido y aparecieron más puercoespines. 

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto José Ardáiz

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto José Ardáiz

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto José Ardáiz

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto Héctor García

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto Héctor García

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto Héctor García

Leones Panthera leo en Lower Sabie. Foto Héctor García

Además vimos una mangosta que el guía cantó como mangosta de Selous (Paracynictis selousi). Yo pensé que debía estar equivocado, pues la Guía de mamíferos del Kruger, decía que era una especie rarísima, con sólo un puñado de avistamientos y siempre en una reducida área junto a Singwedzi, muy lejos de donde estábamos. Sus cortas orejas y su cola desflecada me hicieron pensar que debía ser una mangosta coliblanca (Ichneumia albicauda) y como tal la puse en mi libreta, pero una vez en casa, viendo las fotos y comparándolas con fotos de internet, creo que el guía tenía razón y era una mangosta de Selous, casi con total seguridad. La guía del Kruger es de 2002 por lo que puede estar obsoleta. Además el guía la cantó con total naturalidad, como si se viera a diario por allí. Por lo tanto... la asigno a mangosta de Selous.

Mangosta de Selous Paracynictis selousi. Foto Héctor García

Estábamos disfrutando un gran nightdrive. El mejor sin duda hasta la fecha y yo no hacía más que pensar en el pobre César.  Además hacía un frío extremo y yo, aunque iba con mucha ropa, no llevaba ninguna prenda técnica tipo cortavientos y ya de vuelta al camp, me tuve que meter debajo de los asientos para evitar el aire que se me metía hasta las entrañas. Creo que sólo una o dos ocasiones en mi vida he pasado tanto frío.

Llegamos al camp algo tarde pero realmente contentos por la experiencia. Nos acercamos al bungalow esperando encontrar a César congelado metido en un bloque de hielo, pero yo, en mi eterno despiste, me había dejado el coche abierto, lo que sirvió para que César se resguardara durante el nightdrive. Tras contarle las impresiones vividas y echar unas risotadas con su jugada, empezamos a preparar la última barbacoa del Kruger. Mientras la estábamos haciendo, un par de jovencitas madrileñas se acercaron a conversar con nosotros.  Se quejaban de que no habían visto nada durante el día. La verdad es que estaban un poco perdidas, porque contándoles nuestra experiencia, no sabían lo que era un ratel, un antílope sable, un duiker o ni siquiera un impala! Sólo parecían conocer leones, cebras, elefantes o jirafas y carecían de prismáticos, guías o demás, sólo portando cámaras de fotos compactas de poco alcance. Las invitamos cortésmente a cenar, pero declinaron la invitación porque ya habían cenado y estaban cansadas.

Nosotros, dimos buena cuenta de la barbacoa, del vino y alguna cervecita y como también estábamos muy cansados... a dormir. Alojamiento tipo Hut. 3 pax. Como siempre... para dormir, sobra!

LISTA DE ANIMALES OBSERVADOS. Skukuza – Pretoriuskop – Lower Sabie

AVES

- Francolín de Natal  Francolinus natalensis

- Francolín de Swainson Francolinis swainsonii

- Francolín capirotado Francolinus sephaena

- Pintada común Numida meleagris

- Suirirí cariblanco Dendrocigna viduata

- Ganso del Nilo Alopochen aegyptiacus

- Pito cardenal Dendropicos fuscenscens

- Barbudo crestado Trachyphonus vaillantii

- Barbudo pío Tricholaema leucomelas

- Toco piquirrojo Tockus erythrorhynchus

- Toco piquigualdo sureño Tockus leucomelas

- Toco piquinegro Tockus nasutus

- Cálao terrestre sureño Bucorvus leadbeateri

- Abubilla africana Upupa africana

- Abubilla arbórea verde Phoeniculus purpureus

- Carraca lila Coracias caudatus

- Carraca cola de raqueta Coracias spatulatus

- Carraca coroniparda Coracias naevius

- Martín pescador malaquita Alcedo cristata

- Martín gigante africano Megaceryle maxima

- Martín pescador pío Ceryle rudis

- Abejaruco europeo Merops apiaster

- Pájaro ratón común Colius striatus

- Pájaro ratón carirrojo Urocolius indicus

- Vencejo moro Apus affinis

- Vencejo palmero africano Cypsiurus parvus

- Lechuza común Tyto alba

- Autillo cariblanco sureño Ptilopsis granti

- Chotacabras carirrojo Caprimulgus rufigena ?

- Tórtola engañosa Streptopelia decipiens

- Tórtola de El Cabo Streptopelia capicola

- Tórtola senegalesa Streptopelia senegalensis

- Vinago africano Treron calva

- Turaco unicolor Corythaixoides concolor

- Avutarda kori Ardeotis kori

- Sisón ventrinegro Lissotis melanogaster

- Ganga bicinta Pterocles bicintus

- Jacana africana Actophilornis africanus

- Polluela negra Amaurornis flavirostris

- Archibebe fino Tringa stagnatilis

- Andarríos bastardo Tringa glareola

- Cigüeñuela común Himantopus himantopus

- Alcaraván acuático Burhinus vermiculatus

- Chorlitejo tricollar Charadrius tricollaris

- Avefría armada Vanellus armatus

- Avefría senegalesa Vanellus sengalensis

- Busardo de estepa Buteo vulpinus

- Pigargo vocinglero Haliaeetus vocifer

- Buitre dorsiblanco Gyps africanus

- Buitre de El Cabo Gyps coprotheres

- Buitre cabeciblanco Trigonoceps occipitalis

- Culebrera sombría Circaetus cinereus

- Águila volatinera Theratopius ecaudatus

- Azor lagartijero oscuro Melierax metabates

- Águila rapaz Aquila rapax

- Águila de Wahlberg Aquila wahlbergi

- Cormorán africano Phalacrocorax africanus

- Aninga africana Anhinga melanogaster

- Garceta común Egretta garzetta

- Garcilla bueyera Bubulcus ibis

- Garza real Ardea cinerea

- Garza cabecinegra Ardea melanocephala

- Garza goliat Ardea goliath

- Garcita verdosa Butorides striatus

- Avemartillo Scopus umbretta

- Ibis hadada Bostrichia hagedash

- Jabirú africano Ephippiorhynchus senegalensis

- Marabú africano Leptoptilos crumeniferus

- Drongo ahorquillado Dricurus adsimilis

- Alcaudón brubrú Nilaus afer

- Prionopo crestiblanco Prionops plumatus

- Alcaudón pío Corvinella melanoleuca

- Golondrina común Hirundo rustica

- Golondrina colilarga Hirundo smithii

- Golondrina abisinia Cecropis abyssinica

- Golondrina pechirrufa Cecropis semirrufa

- Bulbul terrestre Phyllastrephus terrestris

- Bulbul naranjero sureño Pycnonotus tricolor

- Turdoide de Jardine Turdoides jardineii

- Cistícola sp.

- Zorzal litsirrupa  Psophocichla litsirupa

- Cosifa de Heuglin Cosypha heuglini

- Estornino de orejas azules Lamprotornis chalybaeus

- Estornino de Burchell Lamprotornis australis

- Estornino carunculado Creatophora cinerea

- Estornino amatista  Cinnyriciclus leucogaster

- Estornino alirrojo Onychognathus morio

- Picabueyes piquirrojo Bufagus erytrorhynchus

- Suimanga acollarado Anthodiaeta collaris

- Suimanga amatista Chalcomitra amethystina

- Suimanga pechiescarlata Chalcomitra senegalensis

- Suimanga del Marico Cinnyris mariquensis

- Suimanga pechiblanco Cinnyris talatala

- Tejedor de anteojos Ploceus xanthops

- Tejedor intermedio Ploceus intermedius

- Tejedor enmascarado Ploceus velatus

- Tejedor casero Ploceus cucullatus

- Tejedor búfalo piquirrojo Bubalornis niger

- Obispo acollarado Euplectes ardens

- Azulito angoleño Uraeginthus angolensis

- Viuda colicinta Vidua macroura

- Gorrión común Passer domesticus

- Gorrión cabecigris de El Cabo Passer diffusus

- Lavandera pía africana Motacilla aguimp

- Serín de Mozambique Serinus mozambicus

- Escribano pechidorado Emberiza flaviventris

MAMÍFEROS

- Guepardo Acinonyx jubatus

- Leopardo Panthera pardus

- León Panthera leo

- Gineta manchada Genetta maculata

- Gineta común Genetta genetta

- Hiena manchada Crocuta crocuta

- Mangosta de Selous Paracynictis selousi

- Elefante de sabana Loxodonta africana

- Cebra de Burchell Equus quaga

- Rinoceronte blanco Certotherium simum

- Facoquero de sabana Phacocoerus africanus

- Hipopótamo Hippopotamus anphibius

- Búfalo cafre Syncerus caffer

- Niala Tragelaphus angasii

- Antílope jeroglífico meridional Tragelaphus sylvaticus

- Gran kudú oriental Strepsiceros zambeziensis

- Suni de Livingstone Neotragus livinstonianus ?

- Impala Aepyceros melampus

- Raficero de Sharpe Raphicerus colonicus

- Raficero común Raphicerus campestris

- Kobo acuático Kobus ellipsipryrimnus

- Antílope sable Hippotragus niger

- Ñu azul Connochaetes taurinus

- Duiker de Grimm Sylvicapra grimmia

- Jirafa Giraffa camelopardalis

- Papion chacma Papio ursinus

- Liebre de matorral Lepus saxatilis

- Puercoespín de El Cabo Hystrix africaeaustralis

- Ardilla de matorral Paraxerus cerapi

REPTILES

- Cocodrilo del Nilo Cocodrylus niloticus

- Tortuga del fango aserrada Pelusios sinuatus

- Tortuga leopardo  Geochelone pardalis

- Escinco africano de cola azul Mabuya quinqueateniata

- Ágama de cabeza azul Acanthocercus atricollis

INVERTEBRADOS

- Mariposa Cola de golondrina limonera Papilio demodocus

- Mariposa Dama blanca Graphium morania

- Mariposa Pansy azul Junonia oenone